Pa de fajol s’atura al coll.
Farinetes de fajol:
250 gramos de fajol, alforfón o trigo sarraceno
medio litro de agua, (y mas o menos otro medio para irle añadiendo)
5 gramos de sal
Bueno como soy un poco embrolla según dice mi madre, yo hago «les farinetes» a mi manera…
Pues pongo el trigo sarraceno en remojo con el medio litro de agua, lo dejo así un día entero, una vez que han pasado las 24 horas lo pongo en una perola a cocer con un poquito de sal, cuando arranca el hervor lo dejo durante 20 minutos, se le añade un poco de agua para que esté siempre cubierto. Una vez que esté bien cocido le paso la batidora y le añado un poco mas de agua, debe quedar de forma y manera que si dejamos la cuchara de darle vuelta en el centro de la masa se aguante por sí sola. Lo llevo de nuevo al fuego justo hasta que empiece a hervir y lo vierto en un molde o en varios cuando aún esta caliente. A medida que se va enfriando se va endureciendo y queda como una gelatina lista para cortar del grueso que queramos y a freír. Yo lo suelo partir de medio centímetro de grosor, pero tengo leído que los cortes pueden ser de hasta 1’5 centímetros de anchos, depende del gusto de cada cuál y de las posibilidades que tengamos nosotros y los comensales porque mi madre por ejemplo no tiene dientes y para ella tiene que ser blandito.
La forma en que yo los vi hacer por primera vez hace muchos años en casa de mi amiga Àngels es la siguiente:
Tenemos preparado un litro de agua y 250 gramos de harina de fajol, vertemos en una olla los 250 gramos de harina de fajol o alforfón, la sal y medio litro de agua lo ponemos a fuego suave para que no se pegue ni se tueste sin dejar de remover y le vamos añadiendo agua a medida que la vaya necesitando hasta que dejando la cuchara en medio se aguante y ya está. Mas o menos el agua que necesitaremos será un litro pero depende también de como nos guste de espesa.
No aguanta muchos días, de manera que hay que gastarlo pronto porque si no, se florece.
La marcha turca – Mozart